Hace unos meses, mi hijo se unió a la Nastic Sport Academy, un proyecto que nos llenó de ilusión desde el primer momento. Cuando conocí a su entrenador Pedro, supe que estábamos en el lugar indicado. Su pasión y entrega por la formación de los chicos es contagiosa, auténtica, y profundamente humana.
En una de sus charlas motivacionales, surgió algo especial: la idea de que mi proyecto debía tener un nombre. Y ese nombre, que hoy representa nuestra visión, nació de una de las frases que Pedro usó para inspirar al equipo. Es un honor que mi iniciativa lleve consigo esa energía, ese mensaje, y ese espíritu de superación.
Mi propósito es documentar la vida deportiva y las emociones que viven los equipos de fútbol base. No se trata solo de partidos o entrenamientos, sino de mostrar cómo esta experiencia se convierte en una auténtica escuela de vida.
A través de imágenes, momentos y relatos, quiero reflejar el esfuerzo, la ilusión, la amistad y el crecimiento personal que se respira en cada rincón del campo. Porque el fútbol base no solo forma jugadores, forma personas.
Mi contenido refleja los valores que hacen grande al deporte: esfuerzo, respeto, trabajo en equipo y competitividad sana.
Mi estilo fotográfico es natural, emotivo y centrado en contar historias. Busco capturar momentos genuinos que muestran vida y naturalidad.
La siguiente jugada no es solo una acción en el campo: Es el reflejo de una temporada completa, el seguimiento de un equipo en su camino deportivo. Cada imagen busca capturar cómo se vive el fútbol desde dentro: la pasión compartida, los valores que se forjan, y las emociones que hacen del deporte una experiencia de vida.
La Siguiente Jugada sigue avanzando. El proyecto ha dado un paso más hacia delante, incorporando videos de larga duración que documentan eventos clave, convivencias y momentos únicos del fútbol base. Además, gestionamos contenido en redes sociales como Instagram y Facebook, creando una narrativa visual que conecta con familias, entrenadores y seguidores del deporte formativo.